jueves, 12 de noviembre de 2009

Rompiendo



Tantos días mirando hacia el mar... en este caso, al igual que en la canción, el mar quedaba al Este. Sólo que era un mar diferente, un océano que separa el corazón de la razón. Y tras esos mil días toca reunirlos, y dejar que los colores recién desaparecidos vuelvan a llenar la vida, los ojos, y en el planeta frecuente una sonrisa que últimamente está guardada en paño.

Va siendo hora de despedirse, no sea que llegue tarde.

6 comentarios:

Paula dijo...

Buen viaje y mejor reeencuentro!

Yandros dijo...

Dejar atrás cosas siempre cuesta.
Creo que es porque tampoco sabemos lo que nos espera
Suerte y un abrazo

Esther dijo...

Volver a sacar los colores y sonrisas que estaban dormidas, debe de ser bonito. ¿Qué sería de un mundo siempre sin color?

Mucha suerte :) Saluditos.

Pugliesino dijo...

Contienen mucho estas líneas, pero atravesará contigo el océano estableciendo un puente ya para siempre.
Que a tu regreso llenes tu vida de felicidad!
Y que se cumpla tan buen deseo de que el planeta frecuente esa sonrisa.

Un abrazo y bienvenido!

Alma (Susurros Mortales) dijo...

Suena a despedida, nunca me gustaron las despedidas, pero esta esta llena de colores, espero que sean colores alegres.

Besos eternos.

Reithor dijo...

Susurros, ¿cómo te suena una despedida de la cárcel?