Hoy hemos tenido un día extraño. En clase de nada, esa en la que los infieles (así los llama Don Francisco) pueden jugar al futbol mientras nosotros atendemos a nuestra e... evanlegización, o algo así, han estado viendo hablando con un señor amigo de un profesor. Han entrado en un aula, cosa que no deberían hacer no fueran a aprender algo que nosotros no. Esto me ha sorprendido, y en el recreo me he acercado a ver qué pasaba. Me ha explicado que el agua en botella es muy mala. ¡Con lo rica que está! Pero muy mala para el medio ambiente... y me ha enseñado esto.
Luego le he preguntado a mamá, que me ha dicho que no debo escuchar las mentiras que les cuentan en la clase de nada y que iría a hablar con el tutor.
No entiendo nada, pero parece una clase interesante.
Entradas
.png)
11 comentarios:
En clase de nada... jajajaja
Que imaginación tienes joder!
Muy bueno reithor, en tu linea
Llevo años protestando por esa falta de alternativa real y nunca se me había ocurrido llamarla Clase de nada jajjajja, creo que te copiaré la idea la próxima vez que vaya a la Delegación de educación a ejercer mi derecho al pataleo.
Y no decís nada del gasto de agua embotellada???
Si que es clase de nada, si
Cuando comenzaron a construir el ensanche del nuevo puerto, lo primero que hubo en la edificación fueron dos máquinas, una un cajero, la otra una de botellas y latas.
Pero lo bueno es que, sé de haberlo visto en varias ciudades, que la gente consume en su propia casa agua embotellada porque la del grifo pues bueno...poca exquisita para una sociedad cada vez mas delicatessen.
Esperemos que este Diario llegue a la prensa :)
Un abrazo!
Sobre este tema, muy interesante las cartas que se maneja Alberto Vázquez Figueroa con la representante de la asociación de empresas de bebida embotellada, en su blog (tengo un link ahí a la derecha).
A mi nunca me ha gustado, y ahora menos. Encantado con mi jarra Brita.
Yo siempre tengo mi botellita pequeña, que la suelo conservar durante bastante tiempo y que me acompaña a todas partes, la gran mayoría de las veces. Me resultaría casi imposible imaginar mi vida sin ella pero, es verdad que el plástico es muy contaminante. Lo malo del cristal, por ejemplo, es que tiene mucha más facilidad de romperse.
Y lo que dice Carlos, es que es verdad, en mi ciudad, el agua está tan clorada, tan clorara, que cuando la bebes parece lejía ¡asquerosa! Pero, claro, comprendo que no tienen otro remedio, porque en pasado, hubo mucha población que cogía tifus, etc. El agua esa, no es de buena calidad. Y entonces, aquí, ¿qué hacen muchos? Comprar botellas.
Saluditos.
Ya he oído hablar de esos filtros,etc. Aunque no tengo ni idea de cómo van. Sería cuestión de interesarse algún día... Aunque en mi casa, siempre rellenamos botellas de nuevo, de una garrafa de agua grande. No las solemos tirar. Las usamos una y otra vez. Como tú dices, siempre se pueden reutilizar. Gracias por la información :)
Otro saludito.
Un gran relato que esconde una buena causa!!!! El plástico es muy contaminante, aunque sí que es cierto que en muchos sitios no queda más remedio por el tipo de agua. Enhorabuena!!!!
Emma, te digo lo mismo que a Esther, si que hay alternativas. Otra cosa es que via publicidad y demás te vendan la moto y parezca que no quede más remedio: pagar el agua más cara (cinco veces más cara) que la gasolina.
Me apunto a esa clase de nada. Todo lo que sea proteger el medio ambiente, merece todo mi entusiasmo y atención. Un abrazo.
Un diario reivindicativo, me gusta! :)
Yo, tanto en Madrid como en mi pueblo, bebo el agua del grifo, pero uso botellitas de plástico en el trabajo, cuando voy de viaje, en el gimnasio... casi siempre rellenadas, como dice Esther. Dices que hay alternativas... cuales? No me digas que lleve en el bolso o en la mochila de aerobic una botella de cristal, porque no me parece viable....
Publicar un comentario